Conocidos vulgarmente como parquet o parquet sintético, a la hora de decorar nuestros suelos de interior, encontramos varias alternativas al clásico suelo de gres. Por un lado, encontramos el suelo laminado al que también se le denomina coloquialmente como parquet laminado. Este, quizá sea el tipo de suelo más común que podemos encontrar en la mayoría de hogares como alternativa al clásico parquet de madera natural. Este tipo de suelo ha ido evolucionando notablemente desde que aparecieran los primeros modelos hace ya medio siglo. Se caracterizan por ser suelos económicos y versátiles, ideales para ser instalados en casi cualquier estancia de nuestro hogar o negocio. Seguir leyendo
Por otra parte, tenemos los suelos vinílicos clik, un tipo de suelo con un aspecto exterior muy similar al anterior, pero con una composición muy distinta y mucho más resistente. Tiempo atrás se utilizaban como suelos vinílicos para cocinas, pero en la actualidad, sus diseños han mejorado tanto que los podemos encontrar tanto en baños y cocinas como en el resto de la casa. Además son tan resistentes que los podemos utilizar en zonas de tráfico alto, como por ejemplo en establecimientos públicos como tiendas, oficinas, etc.
Suelos laminados
Dependiendo del modelo y del uso al que va orientado, encontraremos este tipo de suelo con las siguientes capas (láminas):
- Capa de desgaste: Es la capa superior, la que estará permanentemente en contacto con la superficie. Fabricada con resistentes resinas, es la encargada de proteger la lama de arañazos y roces. Por su composición sintética no absorbe humedades hacia el interior. Esta capa puede ser lisa o con un leve relieve para conseguir, al tacto, un suelo más similar a la madera natural.
- Capa decorativa: Es la capa visible para el usuario, se trata de una imagen digital con un diseño en alta resolución que dota al suelo de realismo.
- Capa de trabajo: Fabricado en HDF o MDF, es la capa central que vela por la dureza y resiliencia del suelo.
- Capa inferior: fabricada también a base de resinas, es la encargada de dotar a estos suelos de la estabilidad necesaria y aislar el resto de la lama del suelo.
Suelos vinílicos
El suelo vinílico clik, también denominado suelos de PVC, es de todas las opciones el suelo más sencillo de instalar, ya que no requiere manta de protección. Sus lamas vinílicas, también denominadas losetas vinílicas están formadas por diversas capas, todas ellas sintéticas. Ello le otorga beneficios únicos como son el aislamiento térmico, el aislamiento acústico y sus características antifúngicas y antibacterianas que lo convierten en la opción más resistente e higiénica del mercado. Éstas son algunas de sus principales características:
- Fáciles de instalar: para su montaje no es necesario herramientas especializadas, ni tornillos, colas u otro tipo de adherentes. Únicamente requeriremos de un cutter o cuchillo cortador para recortar las lamas en la que se precise.
- Son suelos resistentes a la humedad, son ideales para ser instalados en habitáculos húmedos como baños y cocinas, tanto para obras residenciales como obra pública. Si se mojan, no se hinchan ni se deforman con el paso del tiempo.
- Son suelos extremadamente duros y resistentes: Los polímeros y resinas que conforman su capa superior de desgaste salvaguardan el suelo de roces, manchas y golpes. Además, su superficie es antideslizante, aún con el piso mojado.
- Son suelos cálidos y agradables al tacto: Su evolucionado diseño nos recuerda a varios tipos de madera natural o maderas teñidas como por ejemplo el parquet gris. Al tacto, también recuerda la superficie de la madera natural.
- Son suelos higiénicos donde no proliferan bacterias, hongos, moho ni ningún tipo de insectos.
Comparte con nosotros, cuál es el objetivo que desea para su proyecto y le aconsejaremos sin ningún tipo de compromiso, cual es el mejor tipo de suelo para Ud. y el porqué.